Yurimaguas, ubicada en la región de Loreto, Perú, es una ciudad con una historia rica y compleja que se remonta a tiempos prehispánicos. Antes de la llegada de los colonizadores, la zona estaba habitada por pueblos indígenas como los Chayahuitas y los Cocamas, descendientes de los Cahuapanas y los Tupi-Guaraní.

Durante la época colonial, la región fue escenario de numerosas expediciones y enfrentamientos. En 1686, el padre Samuel Fritz, un misionero jesuita, fundó la reducción de Santa María de las Nieves de Yurimaguas el 8 de diciembre de 1709, en la confluencia de los ríos Shanusi, Paranapura y Huallaga. Esta fundación se produjo después de que Fritz y la etnia Yurimaguas huyeran de los ataques de los portugueses en la zona del río Ucayali

A lo largo del siglo XVIII, Yurimaguas se consolidó como un importante centro de evangelización y comercio en la Amazonía peruana. Sin embargo, no fue hasta finales del siglo XIX que comenzó a ser reconocida como la «Capital Histórica de la Amazonía Peruana».

En 1950, la ciudad fue oficialmente designada como capital de la provincia de Alto Amazonas.

En épocas más recientes, Yurimaguas ha experimentado un crecimiento significativo, convirtiéndose en un punto estratégico para el comercio y el turismo en la región. Su historia refleja la confluencia de culturas indígenas y coloniales, así como la perseverancia de sus habitantes ante los desafíos impuestos por la naturaleza y la historia.